Los problemas de la obesidad implican varias complicaciones médicas, tales como enfermedades del corazón, diabetes, cáncer, problemas respiratorios, y condiciones musculoesqueléticas discapacitantes que impiden una buena calidad de vida.
La obesidad también se relaciona con inestabilidad postural, que comúnmente se describe como la capacidad de mantener o restaurar el centro de gravedad y carga con respecto a la base de sustentación. Varios sistemas, tales como el cerebro, sistema visual, vestibular, propioceptivo, sensitivo, y el sistema musculoesquelético, contribuyen al control de la estabilidad postural mientras estamos de pié, y los déficits en estos sistemas dan como resultado inestabilidad postural.
Algunos estudios sugieren que los individuos obesos tienen mayor riesgo de sufrir caídas. Vincent Et al informó que los individuos obesos han reducido su capacidad funcional de movimiento en comparación con individuos con peso normal.
En los individuos obesos, la geometría del cuerpo es modificado por el aumento de la masa de los segmentos corporales. El aumento de la grasa abdominal contribuye al aumento de la lordosis y desplazamiento posterior del centro de gravedad. Las personas obesas han reducido las funciones sensoriales de miembro inferior debido a la presión generada por la masa grasa. Estas alteraciones de la geometría del cuerpo y la alteración de la sensibilidad van a suponer limitaciones funcionales e inestabilidad postural que afectan a las actividades de la vida diaria.
La falta de tono abdominal es un factor que nos condiciona mucho la postura porque los abdominales hacen de freno al prolapso visceral. La presión abdominal es mayor que la presión torácica, por lo tanto, las vísceras abdomino-pelvicas van a tender a ocupar el mayor espacio posible. Si la parrilla abdominal no tiene tono y no realiza su función de contención y tope a las vísceras, entonces ocurre el prolapso visceral. Este prolapso se acompaña de una anteversion de la pelvis y con ella un aumento de la lordosis fisiológica de la columna lumbar.
La hiperlordosis lumbar mantenida en el tiempo generara acercamiento entre sí de los arcos posteriores, y con el paso del tiempo se generara artrosis precoz en la zona.
En el primer caso se observa una columna lumbar normalmente alineada, que va evolucionando hacia un aumento de la curvatura lumbar, por lo tanto la distancia que hay entre las apófisis espinosas se ve reducida y ello conlleva un aumento de la carga que con el tiempo generará una artrosis prematura.
Por lo tanto debemos hacer énfasis en reducir la carga que induce un aumento de la curvatura lumbar, además de flexibilizar y fortaleces toda la faja abdomino-lumbar.
En clínica Campos contamos con un equipo multidisciplinar de profesionales que ayudaran a los pacientes a recuperar su estado óptimo de salud ayudando así a mejorar su calidad de vida.