El concepto desarrollado por la fisioterapeuta australiana Jenny McConnell se basa en la comprensión de la influencia de la postura en las actividades dinámicas, como factor causante de síntomas musculoesqueléticos. Las técnicas utilizadas según este método persiguen el beneficio de los efectos de la descarga de los tejidos blandos para disminuir el dolor y optimizar los efectos del tratamiento. La evidencia científica respalda especialmente las aplicaciones destinadas al síndrome fémoro-patelar y los vendajes para la inestabilidad del hombro.