La NEUROMODULACION es una técnica relativamente nueva y pionera en España, con la cual los fisioterapeutas somos capaces de intervenir en el funcionamiento del sistema nervioso, tanto periférico como central. Con un profundo conocimiento de la anatomía humana, con la ayuda de la ecografía y una buena destreza en el uso de agujas, se puede tratar prácticamente cualquier patología musculo esquelética. La técnica es completamente indolora, rápida y no tiene efectos secundarios. Consiste en la inserción de agujas en zonas específicas del cuerpo (tronco y extremidades), siguiendo trayectos nerviosos, aplicando una corriente eléctrica de baja frecuencia e intensidad tolerable. En un elevado porcentaje de los casos los pacientes experimentan una mejoría notoria de manera inmediata. Proporcionando de esta manera una herramienta más al arsenal terapéutico del fisioterapia que le permita utilizarla en distintas situaciones que la requieran.
En la neuromodulación así como en el resto de técnicas con estimulación eléctrica, uno de los objetivos que persigue la estimulación eléctrica es producir una respuesta inflamatoria inmediata e iniciar los sistemas de autodefensa del cuerpo en respuesta a la patología y daño celular. De esta forma el cuerpo actúa generando sustancias antiinflamatorias y mecanismos autologos de control del dolor. Además se genera una activación de las aferencias de pequeño diámetro (“pequeñas terminaciones nerviosas”) provocando una contracción muscular y una actividad de los receptores del grupo de aferencias tipo 3. Se van a producir dos mecanismos uno por medio de mecanismos analgésicos extrasegmentales y otro mecanismo de analgesia segmental por medio del llamado mecanismo de la puerta de contro (gate control) por el que un estímulo nervioso mecánico (aguja y corriente eléctrica) va a predominar sobre otro sensitivo (dolor), “engañando” a nuestro cerebro y produciendo analgesia.
Otro tratamiento que nos permite la estimulación eléctrica es trabajar el tejido adyacente a los nervios con el fin de liberar posibles adherencias, además mediante guía ecográfica podemos situarnos con la aguja en el tejido que envuelve al nervio y estimular eléctricamente con el fin nuevamente de liberar este tejido de posibles compresiones. Este tratamiento iría dirigido a patologías en las que se viese afectado un nervio por cualquier tipo de compresión.